Al caminar por este sendero es importante darnos cuenta como nuestras aguas son cada día más escasas, y esto se hace evidente al llegar a la Cascada, una caída de aproximadamente 70 metros de altura, cuyo caudal se encuentra muy reducido, debido a una inmensa población de eucaliptos que habita en la parte alta de la montaña, fuera de los predios del Parque.
Las paredes de piedra de la cascada tienen una alta concentración de hierro, el cual les da un color rojizo que contrasta con los intensos verdes de los musgos.
Nivel de exigencia: Fuerte
Longitud del recorrido: 3.5 kms